decisiones

En muchas ocasiones esperé escuchar las palabras que acabas de pronunciar, mi corazón latía con fuerza cuando alguna señal le indicaba que te darías cuenta de que tu lugar estaba a mi lado, mi paciencia estaba fortalecida por la ilusión de que lo harías en cualquier momento.

En muchas ocasiones me quede en silencio porque tus palabras eran otras que me alejaban poco a poco. Mi corazón se desmoronaba con la ausencia de tu amor, mientras que mi razón e instinto de protección se apoderaba de las riendas de mi vida.

Hoy que las escucho las lágrimas no brotan, mi corazón no baila y no corro hacia ti para asirte fuertemente como imagine que sería este glorioso momento. Mis palabras que creí de afecto se tornaron incoloras, te empujan hacia otra, lejos de mí.

Quizá quiera encontrarme contigo como en los meses pasados, quizá quiera alejarte de mí para no volver a sentir tu abrazo. En este momento mis decisiones son inciertas porque espere demasiado para escuchar esas dulces palabras y ahora han perdido sentido, quisiera tener el empuje para correr a tus brazos, pero eso se termino hace varias semanas.

Mi mente no lucha en contra de mi corazón, decide por él porque es la única fortaleza que dejaste en mí, aunque en lo profundo quisiera coincidir en una noche mágica contigo, ya no tengo la fuerza para hacerlo.

Te quiero lejos. Te necesito lejos para sobrevivir.

Algún día mí corazón volverá a latir con la fuerza de un huracán, el amor volverá a llenar mis ojos del brillo que te llevaste al decidir abandonarme, por ahora sólo puedo ofrecerte consuelo porque amor no me queda.